"Descubriremos el valle siguiendo los ríos" - dijo la lamia, un ser mitad pato mitad humana.+
-¿Iruzki?- preguntó una voz.
-Sí, soy yo- contestó con miedo.
-Me acaban de dar el aviso de que vas a recorrer todos los ríos. ¡Menuda alegría! ¡Alguien viene a conocernos! Seré tu guía.
Quien hablaba era Edurne, una hermosa lamia que le miraba entusiasmada
-Conmigo vas a ver el valle de verdad.
Iruzki estaba y no estaba. El miedo se apoderaba de su espacio.
-Iruzki -le dijo Edurne cogiéndole de las manos porque empezaba a desaparecer- no podrás ver ni sentir el valle así. Sé que esto te va a costar pero coge todo el aire que puedas y después, retenlo.
A Iruzki todavía le costaba respirar, pero al intentarlo sintió un suave cosquilleo por todo el cuerpo.
-Ahora suelta el aire muy muy despacio y siente su calor. Muy bien-dijo Edurne.
Iruzki empezó a escuchar a los pájaros y a los insectos hablando con ella en un idioma que todavía no entendía.
-Escucha. Estoy contigo - continuó Edurne-estamos contigo.
La vegetación daba la sensación de ser un solo ser que se dejaba mecer por las gotas de lluvia.
-Sí, soy yo- contestó con miedo.
-Me acaban de dar el aviso de que vas a recorrer todos los ríos. ¡Menuda alegría! ¡Alguien viene a conocernos! Seré tu guía.
Quien hablaba era Edurne, una hermosa lamia que le miraba entusiasmada
-Conmigo vas a ver el valle de verdad.
Iruzki estaba y no estaba. El miedo se apoderaba de su espacio.
-Iruzki -le dijo Edurne cogiéndole de las manos porque empezaba a desaparecer- no podrás ver ni sentir el valle así. Sé que esto te va a costar pero coge todo el aire que puedas y después, retenlo.
A Iruzki todavía le costaba respirar, pero al intentarlo sintió un suave cosquilleo por todo el cuerpo.
-Ahora suelta el aire muy muy despacio y siente su calor. Muy bien-dijo Edurne.
Iruzki empezó a escuchar a los pájaros y a los insectos hablando con ella en un idioma que todavía no entendía.
-Escucha. Estoy contigo - continuó Edurne-estamos contigo.
La vegetación daba la sensación de ser un solo ser que se dejaba mecer por las gotas de lluvia.